María Victoria Díaz Payares
Las Noticias Cartagena
Las ganas de vivir se terminaron de un momento a otro para Eduardo Manuel Llerena Cueto, un adulto mayor de 84 años residente del corregimiento de Barranca Nueva en Calamar, Bolívar, quien la noche del martes decidió atar una cuerda al techo de su casa y ahorcarse, aprovechando un descuido de sus familiares.
La terrible escena la presenció su sobrina Ana María Llerena Torres, quien al percatarse de la ausencia del señor por varias horas en la casa se acercó a su cuarto a eso de las 10:00 de la noche y notó que la puerta estaba entreabierta, algo que él no acostumbraba porque siempre dormía encerrado.
La mujer inocentemente entró a la habitación para saber si su tío se estaba bien y fue ahí cuando lo encontró colgado; de inmediato, con gritos desesperados llamó a otros familiares que ayudaron a bajarlo y se dieron cuenta que ya no mostraba signos de vida.
Por tal razón llamaron directamente al inspector de policía del pueblo en vez de trasladarlo a un centro médico, para que los ayudara a reportar el hecho. Mientras tanto, lo unico que podían hacer por su ser querido era dejarlo tendido en su cama como si estuviera sumido en un profundo sueño.
La madrugada de este miércoles el cuerpo de Llerena Cueto fue trasladado a la morgue de Medicina Legal en Cartagena, donde se le practicará la necropsia y los estudios forenses necesarios para luego ser entregado a sus familiares.
Sobre las razones que tuvo Eduardo Manuel para suicidarse no se tiene ninguna sospecha, ya que no había mostrado signos de depresión anteriormente y la relación con sus familiares era buena.
El adulto mayor se dedicó durante muchos a la agricultura, nunca tuvo hijos y convivía con un hermano y otros familiares en la mencionada .